Silvio decía que lo de sufrir, y además sufrir por amor, era una característica de mujer.
Cristina ya pensaba que Silvio era un hipócrita, un egocéntrico y sobre todo insensible, además de ser insensato y mal parido.
Pero como ya lo dijo alguno de quien no recuerdo ni bien ni mal su nombre: "El amor mueve montañas y fronteras".
Así fue que Cristina atravesó todos los mares del sur y del norte, el Mediterráneo, el Cantábrico y el Índico, para luego casi ahogarse en la piscina del Sheraton Asunción.
No fue sin querer, fue por amor, pero como ya dijo algún otro de quien tampoco recuerdo el nombre: "Yerba mala nunca muere". Cristina sobrevivió.
- Silvio, yo no puedo vivir sin vos.
- Silvio, yo no puedo vivir con vos... en la misma casa, bajo el mismo techo... Bueno, me sacrifico; y lo pintamos a cuatro manos, de dos colores, blanco y negro. - ¿Qué te parece?
- ¡Horrible! Las mujeres son incoherentes. ¿Por qué una mujer debe creer en el amor más de lo necesario, si lo necesario es tan relativo y por otro lado, tan absoluto?
Cristina llora y ríe al mismo tiempo, mientras Silvio ríe y llora, sin que nadie note la mínima diferencia.
- ¿Que querés de mi Cris?
- Tu piel, tu amor, tu atención permanente 24 horas por día, tus codos, tu sangre, tus ojos...
- ¿Para que querés mis codos?
- Por las dudas me duelan los míos.
- ¿Tanto te cuesta hablar en serio Cris? ¡Las mujeres son rejodidas!
- Los hombres son tan espesos, tan lógicos, tan ilógicos, tan rústicos, tan hermosos, tan sensuales...
- Las mujeres mucho más...
- ¿Qué te parece?
- ¿Qué te parece?
Los dos rieron al mismo tiempo y se invitaron a decidir el destino de ambos, por el momento, en un aposento de dos plazas con música ambiental.
Isabel Estercita Lew
Cristina ya pensaba que Silvio era un hipócrita, un egocéntrico y sobre todo insensible, además de ser insensato y mal parido.
Pero como ya lo dijo alguno de quien no recuerdo ni bien ni mal su nombre: "El amor mueve montañas y fronteras".
Así fue que Cristina atravesó todos los mares del sur y del norte, el Mediterráneo, el Cantábrico y el Índico, para luego casi ahogarse en la piscina del Sheraton Asunción.
No fue sin querer, fue por amor, pero como ya dijo algún otro de quien tampoco recuerdo el nombre: "Yerba mala nunca muere". Cristina sobrevivió.
- Silvio, yo no puedo vivir sin vos.
- Silvio, yo no puedo vivir con vos... en la misma casa, bajo el mismo techo... Bueno, me sacrifico; y lo pintamos a cuatro manos, de dos colores, blanco y negro. - ¿Qué te parece?
- ¡Horrible! Las mujeres son incoherentes. ¿Por qué una mujer debe creer en el amor más de lo necesario, si lo necesario es tan relativo y por otro lado, tan absoluto?
Cristina llora y ríe al mismo tiempo, mientras Silvio ríe y llora, sin que nadie note la mínima diferencia.
- ¿Que querés de mi Cris?
- Tu piel, tu amor, tu atención permanente 24 horas por día, tus codos, tu sangre, tus ojos...
- ¿Para que querés mis codos?
- Por las dudas me duelan los míos.
- ¿Tanto te cuesta hablar en serio Cris? ¡Las mujeres son rejodidas!
- Los hombres son tan espesos, tan lógicos, tan ilógicos, tan rústicos, tan hermosos, tan sensuales...
- Las mujeres mucho más...
- ¿Qué te parece?
- ¿Qué te parece?
Los dos rieron al mismo tiempo y se invitaron a decidir el destino de ambos, por el momento, en un aposento de dos plazas con música ambiental.
Isabel Estercita Lew
14 comentarios:
¡Eso es primordial!...la música ambiental.
Ja,ja,ja.
Un beso.
Ja, ja, Esteban, es verdad, pero además me divertí un rato escribiendo esto.
Besos
Sufrir por amor no es una característica solamente femenina. Mil tangos no pueden estar equivocados.
Marce, no es solamente femenina, pero creo que es especialmente femenina.
Beijos
La presentación más el diálogo ¡¡ESPLÉNDIDOS!!
No se puede, vivir sin amor :)
Aunque las cuentas no se pueden pagar con amor jajaja pero sin él estamos perdid@s.
Besos con abrazo .. todos para vos NOOO, dale muchos de mi parte a Lulú :)
María Rosa, viste, hermosa, sin amor estamos perdid@s y con él a veces jodid@s, jaja, le mandé tus saludos a Lulü, ella tambien me dice que te mande un beso enorme.
Besote
Me haz hecho reir mucho.
Me ha encantado el texto, ahora puedo demostrar a mi amada que sus codos si son necesarios en el amor.
Fabuloso diálogo, fluido e irreverente.
Eso Fero, todo es necesario en el amor. Que bueno que te hice reir, yo también me divertí mucho escribiéndolo.
Besote
Te divierte el escribir Bueno a mi me pasa lo mismo y a veces ni me entiendo cuando escribo terminando entendiéndome al final del escrito
Silvio suena medio idiota, te soy sincero, acá le doy la derecha a Cristina, un poco desde la ignoracnai, es cierto...
ojalá las guerras en general fueran de los sesos, seria todo por lo menos un poc más llevable, aunque más egocentrico y un poquitito desproporcionado
Me gustó mucho este blog, volveré seguido, te espero por los mios cuando quieras
saludos!
Recomenzar, nos divierte! Aunque a mí no siempre me divierte, a veces me enloquezco y sublimo mis sentimientos escribiendo, pero pienso que eso nos pasa a todos. Y recomenzamos, como tu nombre.
Yo piensa que son idiotas los dos, pero me viene a cuento que la pasión, como en este caso no idiotiza un poco. Gracias por tu visita.
Horrible! Las mujeres son incoherentes. ¿Por qué una mujer debe creer en el amor más de lo necesario, si lo necesario es tan relativo y por otro lado, tan absoluto?....
Silvio dice la pura verdad !!!!! ;)
Palacio de la Risa, yo creo que Silvio y Cris están loquitos, ja,ja
Besos
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