martes, 3 de marzo de 2009

La glándula de la Bronca




La glándula de la bronca no se me dispara todo el tiempo, en realidad cada vez menos, la bronca y todos sus derivados son perjudiciales, hacen mal a la salud y no hace falta hacerle mal a la salud, los propios genes o la vida se encargan de eso. Sin embargo a veces no me alcanza la gula contra mis uñas para tragarme la bronca, ni mis inciensos, ni mi superconcentración en pensamientos positivos. Tampoco me alcanza apagar la tele, la radio, el diario, porque acabo leyendo los medios alternativos, y entonces me pongo tensa, me pongo propensa a la bronca. Ya fui atrás, ya hice de todo apoyando lo que sea contra la injusticia, lo sigo haciendo aunque no de un modo tan apasionado.
Siempre siento que todo lo que se institucionaliza acaba haciéndose mierda de alguna forma.
Por aquí no institucionalizaron las drogas, ni el aborto, ni el libre pensamiento, de alguna otra forma le quitaría dinero al poder. Aunque así sea el poder no es algo a lo que aspiro, en realidad apenas aspiro a un mundo mejor, sin ganas de sentir bronca, sin ganas de esquemas, aunque no pueda dejar de sentir bronca de cosas que me entero aunque no prenda la tele. De todos modos todo es parcial, una mujer mediática despotricó contra los derechos humanos, se trató de una reacción, será por eso reaccionaria?
Si me dejara llevar por la bronca, le daría un par de piñas, pero mi glándula no se me dispara todo el tiempo porque entonces la bronca y todos sus derivados no se acabarían nunca.




Isabel Estercita Lew

12 comentarios:

*//////* dijo...

La glándula de la bronca se te dispara cada vez creo que porque vamos perdiendo la capacidad de asombro, son tantos los horrores que exscuchamos y vemos que nos vamos acostumbrando... cosa que... no es bueno eso.

Sigamos sublevandonos ante las injusticias, yo trato de hacerlo (no siempre puedo lograrlo, no es fácil)

Te dejo un abrazo enorme.
Gracias por pasar, porque así me permitiste conocerte.

Tengo ese blog en joda justamente para distenderme un poco de mi otro blog, en el que sí lucho contra una injusticia que cometieron contra mi padre.

Besosss

Isabel Estercita Lew dijo...

Gracias por tu visita, María Rosa, ya te escribí hace un rato sobre lo de tu otro blog.
Cariños

Marcelo dijo...

Pegale un shock!

Isabel Estercita Lew dijo...

Buena idea, Marce!
Beijos

ade dijo...

- Si, te entiendo, a veces se nos hace muy dificil controlar la ira. Apague todas las radios, la tv. no quiero leer los diarios, pero esa energía con olor a injusticias, no para y se desata la ira. Bsos. Ade

Isabel Estercita Lew dijo...

Ade, ya vengo apagando teles y radios hace tiempo, aunque no sea la solución prefiero administrar yo mismo el horror y que no me lo encajen los medios sin vaselina... Que sería de muchos de nosotros sin poesía?
Gracias por tu visita, poeta.

Anónimo dijo...

he aprendido a controlar mi glándula de la bronca,
se controla cuando pienso en la vejez o en la muerte, en lo absurdo de acabar con mis momentos presentes.

Isabel Estercita Lew dijo...

Que suerte, Fero, a mí cada tanto me salta la térmica.

DULCE dijo...

Mil gracias por pasar por mi rincon!
Te lei, y fue como leerme a mi misma.
Tengo la glandula de la bronca a punto de reventar!
Tal cual escribe Maria Rosa, vamos perdiendo la capacidad de asombro ...y NO QUIERO!!!!!
Seguire tus utopias,
seguiremos luchando contra tanta injusticia,
quiero dejarle a mis nietos un mundo mejor!
Te dejo un besote
Dulce

Isabel Estercita Lew dijo...

Dulce, así es, atrás nuestro viene gente y quiero y debo dejarles un mundo mejor.
Gracias a vos
Besos

Antonio Ruiz Bonilla dijo...

Si hay una cosa que tengo clara en esta vida es que algún día acabaré de aprender a tocar la guitarra, entonces me compraré una realmente buena, y espero cogerle el cariño que tú a la tuya, será una excelente señal. Me gustó tu relato. Un saludo

Isabel Estercita Lew dijo...

Antonio, la guitarra es una excelente compañera y te da las melodías que le sabés arrancar.
Cariños